Dar clase a niños pequeños es una aventura para la que nunca estás preparado si eres inexperto. Da igual lo mucho que te avisen de lo revoltosos y espabilados que son por naturaleza, de lo mucho que se asemejan sus mentes a una esponja o lo difíciles que pueden llegar a ser de controlar, pues siempre conseguirán sorprenderte.
Llevo ya algunos meses trabajando con niños de entre 3 y 4 años, divididos a partes iguales entre niños y niñas, y una de las primeras cosas de las que me di cuenta es que están en una edad algo contradictoria, en mi opinión. Es decir, así como hay conceptos lógicos que les cuesta bastante entender, otros los pillan al vuelo, especialmente cuando se trata de distinguir lo que está bien de lo que está mal. Esta poca experiencia que he adquirido me ha permitido descubrir que, aunque sea de manera muy inconsciente, intuitiva e intermitente, los peques son capaces de identificar comportamientos inadecuados. Por ejemplo, hubo una ocasión que fue verdaderamente graciosa. Un niño y una niña que son muy amigos, entre risas pícaras, comenzaron un diálogo teatralizado. Poniendo voz exageradamente grave, se daban palmadas en la espalda reproduciendo un "Hey, colega, me alegro de verte. A ver cuándo tomamos un pinchito y una cerveza" a imitación, como es de suponer, de sus padres, que seguramente mantuvieron una conversación semejante alguna vez que se habían encontrado por la calle. El caso es que había algo en lo de la "cerveza" que los hacía desternillarse de risa, y más aún cuando les dije que aquella era una palabra para adultos.
Este es uno de los muchos momentos estelares de los que son protagonistas. No obstante, así como muchas de sus apasionantes interacciones me hacen sonreír, otras me provocan reflexiones inesperadas. Una tarde, mientras jugaban en el aula, esta misma niña cogió un camión de juguete y se puso a hacer como que lo conducía. Acto seguido, su compañero la miró algo mosqueado y, sin poder resistirse, le espetó muy convencido que "las niñas no tienen camiones". La otra, que no se dejó achantar tan fácilmente, le respondió con un "¿Y eso por qué?". "Porque las niñas no son valientes", fue la rotunda contestación del pequeñajo. A continuación, se enzarzaron en una breve discusión típica de críos en las que los argumentos del porque sí y porque no dejan paso con rapidez a otro tema de interés, pues no olviden que su capacidad de atención -así como de rencor- es bastante reducida a estas edades.
Aunque no con frecuencia, algún que otro momento de este estilo se repitió, hecho que no dejó de sorprenderme. Más que nada, porque con los esfuerzos que se están llevando a cabo en la actualidad por desterrar los estereotipos de género, me asombra e inquieta que en edades tan tempranas se escuche todavía un "las chicas no son fuertes" o "las chicas no hacen eso". Sin embargo, ante aquel diálogo de camiones y niñas valientes, me vino en seguida a la cabeza esa imagen de los dos imitando a sus padres, de esos pinchos y cervezas que tanta gracia les había hecho. Y pensé que, en efecto, los niños y niñas observan, descubren, analizan, pero sobre todo copian. Copian a sus padres, sus profes, sus amigos, y al mundo que los rodea, donde a veces se transmiten mensajes erróneos de manera imperceptible. Tenemos una responsabilidad mucho mayor de la que somos conscientes, en realidad.
Sí, es posible que esto no sean más que chiquilladas, y lo son, de hecho. Pero, aún así, creo que es importante no bajar la guardia y recordar que esa gran capacidad de imitación puede ser un arma de doble filo. Por tanto, pienso que es mejor que entiendan -o que les enseñemos, más bien-, ahora que están a tiempo, que no hay cosas de niños (masculino, plural) para que en el futuro no se conviertan en adultos que le ponen género a la valentía... ni a los camiones.
Hablar de educación en una entrada de blog es difícil, siempre te quedas corto, no se puede poner todo lo que se quiere decir, a mi me ocurre lo mismo cuando trato sobre el tema, trato siempre de no sobrepasar de una página Din A-4.
ResponderEliminarMe gusta, como educador, trabajar especialmente con niños de primaria (hasta doce años) o con adultos, son los más agradecidos, de hecho ha sido con ellos con los que he trabajado, la edad de la pubertad es complicada; en cuanto a los esfuerzos en educación para salvar los estereotipos de genero, es cierto que en la escuela, al menos en algunas, se lucha para suprimirlos, pero la educación no solo es la escuela, también es la familia, son los amigos, es la televisión, son los juegos de internet, etc, y por ahí la cosa aún está muy lejos, hay intereses de todo tipo.
Un saludo
Sin duda es un tema que da para mucho, pero siempre es bueno hablar de él, aunque sea de manera breve y concisa. Yo este año doy clase a niños de entre 4 y 15 años, y es cierto que en cada rango de edad manifiestan una actitud y un interés distinto por las cosas.
EliminarEn cualquier caso, tanto en los pequeños como en los mayores se refleja a simple vista qué tipo de educación han recibido en casa, tanto en lo que concierne a la igualdad de género como en otros aspectos.
Hay todavía mucho que cambiar.
Un abrazo.
Buenos días, Sofía
ResponderEliminarYo he trabajado con niños y tuve la misma experiencia que tú. Cuando oígo en boca de muchos adultos decir: Los pequeños no se enteran de nada. Ardo por dentro y me dan ganas de decirles, ¿Perdona?, ¿Cómo qué no se enteran? Seréis vosotros los que no os enteráis. Está claro que los peques observan e imitan.
El otro día vinieron mis sobrinos a casa. Tengo una casita de muñecas desde hace bastantes años. Mi sobrina, le gusta jugar conmigo. Así que nos fuimos a la habitación donde está dicha casita. Mi sobrino al poco, entró y lo subí a una silla para que pudiera jugar también. Tengo dos figuritas de terracota. Una es un ángelito y la otra pastorcila. El caso es que mi sobrino me preguntó: El ángel es una chica? Porque si lo es no quiero jugar con esta figura... Me quedé ojiplática. Le dije, los Ángles no son ni chico ni chica. Sabía que no iba a entenerlo, pero se conformó y siguió interactuando con su hermana y conmigo.
Ojalá algún día dejen de existir etiquetas y sobretodo que hombres y mujeres estemos unidos y quiparados en muchos aspectos.
Un besito!
Buenas, Eowyn.
EliminarSí, en clase también se han dado ese tipo de situaciones en la que los juguetes o figuras masculinas son utilizados por los niños y viceversa, pues tanto unos como otras no se sienten cómodos jugando con personajes de sexo distinto al suyo. Aún así, yo también decidí tomar la situación con naturalidad, haciéndoles ver que no pasaba nada por utilizar juguetes de chico o chica. Y tan anchos se quedaron.
Un abrazo.
Buah! Qué me vas a contar! Tengo a la peque con 2 años y 2 meses y este año en septiembre, entrará en el colegio. Cada día descubro palabras, gestos y reacciones iguales que los del padre o míos y sinceramente da miedo. Soy de las madres psicóticas, lo confieso, que le gusta indagar en nuevas formas de educar. Soy de las que se ha leído muchos libros Montessori, y sobre Disciplina positiva, para luego hacer un patiburrillo con lo que me gusta, mezclándolo con lo antiguo de toda la vida. Y sí, los niños son esponjas pero en todo. Nos imitan en cada momento, y si no te das cuenta, se quedan también con lo malo.
ResponderEliminarDescubrí que cuando Nuria se enfadaba, gritaba. Y como buena madre le decía que no gritara. Pero como me da por pensar y leer, me investigué a mi misma. ¿Cómo mi hija va a dejar de gritar cuando se enfada, si cuando ella hace algo mal, lo primero que hago es gritar su nombre (gritar lease levantar ligeramente la voz no soy de las que deja el tímpano roto)? Así que desde ese momento, cuando hace algo que no me gusta, intento modular la voz. Estamos consiguiendo que deje de gritar aunque ahora ha cogido otras manías. En fin...
Pero sí, creo que para ser buenos padres tenemos que hacernos mejor personas para que ellos sean reflejos mejores nuestros. Nosotros trabajamos en ello: intentamos criticar lo menos posible delante de ella, porque considero que si existe el bulling es porque en casa ven como nos criticamos unos a otros. En fin... como bien te han dicho por ahí arriba, hablar del tema de educación es tan largo que no tendríamos blogs suficientes para comentarlo.
Buenísima entrada. y maravilloso trabajo el tuyo.
Me parece que como madre tienes una actitud muy positiva, Violeta. Te digo que los profes, aunque seamos unos novatillos, intuimos qué educación reciben en casa los pequeñajos solo con interactuar un par de veces con los padres. Educar a un niño es un trabajo jodido, tanto desde la docencia como desde la paternidad o maternidad, pero son esos pequeños gestos los que al final cuentan para modificar comportamientos inadecuados.
EliminarAdemás, me parece fenomenal que indagues y te empapes de literatura especializada, pero aplicando también tu intuición y tu propia experiencia personal. Ya verás que Nuria va a quedar encantada cuando empiece el cole.
Un besazo y mil gracias!
No dejes de escribir esas impresiones, puede ser un libro dentro de unos años y no dejes de sorprenderte, es sinónimo de jovialidad pero sobre todo no dejarás de aprender, estás disfrutando de una situación privilegiada. Un abrazo
ResponderEliminarEster, muchas gracias por este cálido comentario. Para escribir un libro sobre el tema aún me queda mucho camino por recorrer y mucha experiencia que adquirir. De momento, me voy fijando en lo que veo y procuro aprender al máximo, sacando mis propias conclusiones para ver qué puedo aportar yo como educadora.
EliminarUn fuerte abrazo.
Son muchos qjienes alegan que la conducta inadecuada debe corregirse en la escuela, que es ahí donde hay que educar a las personas y se olvidan de que es en casa donde aprenden realmente los modelos de conducta. Los padres son los principales (por no decir los únicos) responsables de la educación de sus hijos y estos aprenden del ejemplo que aquellos les dan. La escuela debe educar, por supuesto, pero si los niños "vienen de casa" mal educados (o maleducados), poco se podrá hacer para corregir esa deficiencia, creo yo.
ResponderEliminarEn cuanto a las tendencias a la hora del juegos, no tengo conocimientos de psicología infantil, pero creo que sí que existe unas ciertas afinidades según el sexo de los críos. Una vez leí que, en un "experimento" con niños de muy corta edad, a los que todavía no se les había "inculcado" el gusto por un determinado tipo de juguetes, la mayoría de niñas preferían las muñecas, por poner un ejemplo. En otras cosas, sí que hay una clara influencia de los padres (al niño se le regala un Scalextric o un tren eléctrico y a las niñas una cocinita o una casa de muñecas). Por no hablar del color de la ropa de bebé: azul para los niños y rosa para las niñas.
Un tema muy interesante, que daría para una tesis doctoral, jeje
Un abrazo.
Es cierto que la escuela debería hacer más hincapié en ese tipo de educación que no se da a través de los libros, pero siempre he tenido muy claro que la última palabra la tienen los padres y el modo en el que ellos enseñan a sus hijos. Contra los mal educados o maleducados poco podemos hacer los profesores.
EliminarPor otro lado, bien es cierto que existe una carga biológica que marca diferencias entre las preferencias de los niños y las niñas. No obstante, y aunque no me he informado lo suficiente sobre el tema a nivel científico, creo que una buena parte de esos estereotipos que surgen son producto de la influencia social y cultural. Es por ello que hay que intentar modular esas actitudes para asegurar un futuro más igualitario.
El tema da para tesis y para libros, y artículos y mil cosas más jeje.
Un abrazo.
Te lo tienes que pasar pipa con esas cosas, sobre todo con lo de las palmaditas en la espalda.
ResponderEliminarLo de las chicas no tienen camiones, no son valientes (somos), los lazos azules y todo ese sexismo ya desde pequeños me da muchísima rabia. Qué lástima que se eduque así.
Menos mal que hay personas como tú que seguro que los guían por el camino de la igualdad.
Besos.
Sí, así como me lo paso pipa, también aprendo mucho, y a veces, como es lógico tengo armarme de paciencia porque no me quieren hacer ni caso jajaja
EliminarIntento hacer lo mejor que puedo.
Mil gracias y un besazo.
Nos corresponde a los adultos no mantener esos estereotipos, y también a la educación que reciben a esas esas edades, para que no se les forjen ideas ya establecidas sobre cómo deben comportarse según su género. Muy interesante lo que escribes.
ResponderEliminarSaludos
Sí, Ana, todo está en la educación que reciben.
EliminarMuchas gracias y un beso.
Cuánta razón tienes en que muchas veces se transmiten mensajes erróneos de manera imperceptible, casi sin darnos cuenta, y es ahí donde está el quid de la cuestión, en esa educación que reciben los niños en sus primeros años de vida, en la educación infantil y primaria porque cuando el árbol ya se ha torcido...difícil enderezarlo.
ResponderEliminarEstoy con Josep Mª en que la educación ha de nacer en casa. Los padres educan y los profes enseñan.
Y, como Ester, te digo también que te empapes bien de todas las experiencias que seguro que te llevarán a conclusiones interesantes a la hora de enseñar tú.
Un beso, Sofía.
Sí, Chelo, a veces creo que la educación en edades tempranas es mucho más importante de lo que creemos. Intento empaparme al máximo para ver qué puedo mejorar yo, en la medida de mis posibilidades.
EliminarUn besote.
Interesante Sofia, decir que los niños no se enteran es del todo equivocado, se enteran y mucho y también lo es que se aprende más lo que se ve que aquello que se dice. Es interesante observar a padres pegados a sus móviles diciendo a los niños que jueguen o haciendo actividades que después reprenden en los críos y es que los niños son los que más detectan nuestras incoherencias y ellos hacen lo que ven.
ResponderEliminarEs preocupante que niños tan pequeños sigan repitiendo esos mensajes pero es lo que están escuchando a su alrededor, sin filtros y la escuela puede hacer mucho pero en casa también hay mucho trabajo por hacer.
Hay campañas de sensibilización muy interesantes para romper esos estereotipos que siguen existiendo pero es algo para lo que se requiere paciencia y mucha constancia porque cambia muy lentamente. A mi me gusto especialmente una que se hizo sobre mujeres inventoras, igual ya la conoces.
aquí si quieres ver
(espero que funcione el enlace)
Besos
No conocía la campaña, pero me parece una idea fantástica y una iniciativa muy necesaria. Gracias por el enlace, Conxita.
EliminarSí, las cosas cambias, pero como bien dices, a paso lento. Es por ello que hay que persistir y luchar desde la educación.
Un beso.
Siempre he dicho que no se terminará con la violencia machista mientras no se haga desde el ámbito de la familia y desde la más tierna infancia. En los colegios e institutos se hacen cantidad de actividades de todo tipo orientadas en ese sentido, pero mientras no lo mamen en casa desde la cuna, no hay nada que hacer. la violencia machista es la expresión más extremada del problema, pero son increíbles los comportamientos machistas que tienen tanto chicos como chicas, en la adolescencia... y los que cometemos sin querer algunos profesores. Aún me pongo roja cuando recuerdo, explicando anatomía de los peces y pregunté "¿nunca habéis ayudado a vuestra madre a limpiar sardinas?". Rápidamente rectifiqué y dije "Bueno, o a vuestro padre". hay que tener un cuidado... Está claro quién limpiaba las sardinas en casa de mis padres.
ResponderEliminarUn beso.
Siendo profe se tiene además una mayor presión en este sentido, pues desde el colegio se tiene que hacer mucho hincapié en educar para la igualdad de género. Estoy totalmente de acuerdo en que, si bien estas medidas ayudan, lo que se ve y aprende en casa sigue siendo determinante. Es por ello que es tan jodido luchar por problemas del estilo, porque desde el ámbito familiar cada quien recibe una educación distinta.
EliminarUn abrazo.
¡Hola, Sofía! Bueno que par de temas nos traes hoy. Los niños se enteran y de qué manera. Otra cosa es que comprendan o entiendan lo que ven. Pero son esponjas emocionales, perciben de inmediato si un acto es bueno o es malo. Un bebé es como una cámara de 24 horas, los niños ven todas las reacciones de los padres, aun esas que pasan desapercibidas a los propios padres. Si los platos los lava siempre el mismo, ya es una imagen. Si quien regaña es siempre el mismo, es otra. Asocian hechos, acciones y reacciones... diría que son los expertos número uno de la comunicación no verbal.
ResponderEliminarEn cuanto a la diferenciación de género. Puf, no sé hasta qué punto las aficiones de niños y niñas son aprendidas o vienen de fábrica. Recuerdo de niño, que los chicos siempre andábamos detrás de un balón, mientras las niñas saltaban la comba. ¿Por pura inercia o acto aprendido?
Lo que si me llama la atención, por el trato que veo en los adolescentes, es lo poco que hemos cambiado respecto al tema del machismo. Bajo mi balcón hay un bar y a veces, cotilla que es uno, escucha. "No digo que sea buen chaval, pero es que el otro es el que me da caña"; "Puá, esa te digo que te la ... con decirle dos chorradas"; "Es que me quiere, por eso es como es"... Bueno, es solo un extracto de lo que escucho. Evidentemente no se puede generalizar, pero me recuerdan mucho a las conversaciones de treinta años atrás y las noticias que aparecen en la prensa no disminuyen en cuanto a violencia machista. Y todo ello pese a la concienciación de los mediso y políticas institucionales y los centros de enseñanza. En fin, no sé si podemos cambiarnos en según qué temas... Un abrazo!!
Como le comentaba a Josep, yo creo que tanto la biología como la sociedad inciden en esta cuestión. No obstante, creo que los avances que se han conseguido en materia de igualdad de género han demostrado que al final tiene mayor peso la educación y la cultura.
EliminarY sí, es triste pensar que todavía haya que escuchar noticias, comentarios y ver comportamientos que demuestran cuánto nos queda por hacer.
Un abrazo David, gran aportación.
Totalmente de acuerdo contigo, Sofía. Los niños aprenden tomando como modelo de referencia lo que ven y después lo copian. Por eso es tan importante "predicar con el ejemplo" a estas edades tan tiernas. Mi hermana tuvo centro de educación infantil durante catorce años y nos contaba unas cosas tan interesantes...
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu entrada, da que pensar bastante.
¡Un beso!
Gracias, querida Julia.
EliminarCuando trabajas con niños y adolescentes te das cuenta de lo que falla en la sociedad, aunque también lo que ha cambiado, para mejor.
Un abrazote.
Un post super interesante!! Los niños aprenden por imitación!! Así que es muy importante trasmitir unos valores adecuados pero sobretodo ser nosotros los que actuemos de una determinada manera.
ResponderEliminarBesicos bonita!!
Exacto, de los adultos de ahora depende el futuro de los adultos de mañana.
EliminarUn besazo y gracias por pasarte.
Los niños son auténticas esponjas y aprenden mucho viéndonos. Así que hay que tener mucho cuidado con lo que se hace, con lo que se habla, que lo cogen todo al vuelo. Y sobre todo, no dejar la labor de educación solo a los profesores. Que parece que para muchos padres la responsabilidad de la educación solo la tiene el colegio y se olvidan de su parte. Y sí, este tema siempre da para hablar mucho.
ResponderEliminarBesotes!!!
Muy de acuerdo, Margari. Hay padres que esperan que sus hijos pulan sus imperfecciones a través del colegio, sin pasar antes por casa.
EliminarUn besazo.
Una entrada muy didáctica Sofía. Cómo padre de una niña de primaria y con un entorno de maestros/as en mis círculos has desarrollado la tesis propuesta a la perfección. Los comportamientos de imitación y en mi humilde opinión tiene la clave del comportamiento de los pequeños. Respecto a porque en el patio del colegio hay por ejemplo más niños que niñas jugando al fútbol, o más niñas que niños reunidas charlando o jugando a otras cosas no sabría encontrar una razón concreta y precisa, pero me llama la atención al verlo desde mi ventana en el patio del recreo. En todo caso es muy importante y aunque a estas alturas debería estar superado, una enseñanza en igualdad y también en buena educación y urbanidad que es la base de personas más firmes y más sensibles.
ResponderEliminarUn abrazo y mucha suerte en tu labor profesional.
Miguel, ya hace más de una década que pasé por la educación primaria, y te puedo decir que sigue siendo exactamente igual a como lo describes. Los niños se apropiaban del patio para jugar al fútbol, mientras las niñas estábamos alrededor jugando con muñecas o charlando.
EliminarEsperemos que los profes podamos hacer algo para que se produzca un cambio significativo en este sentido.
Un abrazo y mil gracias.
Parece ser que los padres de ese niño no conocen Valiente o que de conocerla les parecerá demasiado descabellado que una mujer pueda hacer todo eso. Ni hablar Sofi, los hijos están condenados por los padres que les tocan, de qué otro lugar puede uno aprender. Pero esas maravillosas esponjas que son también aprenden a ver que lo que sus padres hacen o dicen no es tan maravilloso como pensaban. Yo tengo dos sobrinos casi de la edad de Gil que dan algo de miedo. Los dos pobres cantando canciones de reguetón desde que tenían como 7 años y ahora parece que serán dos machitos como su padre y su abuelo. Pero es que no se puede esperar mucho de esos papás.
ResponderEliminarEs maravilloso toparse con la arrolladora lógica de los niños verdad. Te dejan perplejo muchas veces.
Mira, ya estarás más preparada si es que quieres tener hijos.
Te dejo un gran abrazo.
El maldito reggaeton, si ya pudre el cerebro de los adultos, imagínate el de los niños. No obstante, me ha gustado mucho eso de que a veces es posible darse cuenta de que nos han educado erróneamente, y actuar en consecuencia.
EliminarLa lógica de los niños me ha dejado muchas veces sin palabras, preguntándome si ellos sabrán más que yo al final jajaja
Otro abrazo para ti, Gilo.
Hola Sofía, gracias por dedicarte a una profesión tan altruista como incomprendida, la docencia....casi nada.....
ResponderEliminarY por supuesto, tenemos tanto que aprender de nuestros peques.....
Gracias, pasa buen día, besos realizados..
Es una profesión desmotivante a ratos, pero reconfortante a largo plazo, cuando se ven los frutos.
EliminarGracias a ti, feliz sábado.
Es una suerte, Sofía, que los niños tengan la oportunidad de contar con una profe como tú. Supongo que aunque llegues agotada a tu casa después de la intensa jornada laboral con los peques, tengas la capacidad de observación y reflexión sobre ellos y con ellos. Casualmente hace unos días vi un documental (lo tienes enyoutube) sobre LA VIDA SECRETA DE LOS NIÑOS, de la edad que mencionas, 3 y 4 años. Me encantó, tanto como tus observaciones con el comportamiento de los niños y los roles sexistas reminiscencias que se traen de casa.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte y ánimo con los peques.
Es cierto, Tara, los peques me dejan sin energía la mayor parte de los días que tienen clase conmigo. Y vaya si me hacen reflexionar.
EliminarConozco el documental del que me hablas, lo vi y me encantó. Qué risas me eché con el capítulo de la máquina expendedora de caramelos jaja.
Gracias, gracias de verdad, Tara.
Besotes.
Pues por desgracia todavía es así, no todo el mundo, pero sí hay personas que podrían defender por qué los niños con las cosas de niños y las niñas con las muñecas y las cocinitas. Es irritante! Yo he jugado siempre con mi hermano y mi primo, y todos tan felices. Ains, no me gustan nada las estiquetas, y creo que ese niño que increpaba a la niña debió de aprenderlo en algún sitio. Tampoco creo que sea sólo una frase que haya escuchado, creo que es más bien una conducta. ¡¡Pero bien por la niña que se defendió!!!
ResponderEliminarEstas navidades fuí a comprar el regalo para las sobrinas de mi novio, y en la sección de playmobil hay cajas azules y cajas rosas. Las azules son los palymobil relacionados con trabajos, arqueologos, un zoo, policias etc etc y las cajas rosas son de (para alucinar!!!) bodas!!! Ropa y amas de casa!!! A ver, me parece bien que existan, pero no que la caja sea rosa, y si van a hacer diatinciones, que saquen algo rosa que sea aventurero. De verdad, me sulfuré porque me pareció exageradamente machista!!!
En fin, si no te quieres cabrear no entres nunca en una sección de playmobil.
Muy buena entrada y muy buena reflexión, como siempre! Un besoteeee
Ir a comprar regalos es una odisea por muchos motivos, pero sobre todo por lo difícil que resulta escapar de esos juguetes que quieren transmitir rancios estereotipos a como dé lugar. En este caso, María, hay que intentar buscar la mejor opción, que seguro que alguna se encuentra.
EliminarGracias por comentar, guapa.
Un besazo.
Y es que todo empieza con la educación,... en casa y en la escuela. Estupenda reflexión Sofía.
ResponderEliminarGracias, Norte.
EliminarA través de la escuela y la familia es donde se logra educar hacia el cambio.
Un abrazo.
¡¡¡¡Hola!!!!
ResponderEliminarClaro que los niños se enteran, y lo peor es que si en casa no se les corrige lo que con 4 años no tiene demasiada importancia cuando son mayores sí que la tiene.
Besos y como siempre una entrada estupenda.
Así es, Marigem. Las manías que se cogen de pequeño son después fui difíciles de corregir.
EliminarUn besote.
El medio sigue influyendo en estas cosas :( Juraría que, respecto a mi infancia, se ha mejorado un poco con esto, pero aún queda mucho por hacer y tu post es la prueba :/
ResponderEliminar¡Un abrazo!
Es obvio que se ha avanzado mucho, Letraherido. Por eso me sorprendió tanto ver que, a pesar de lo que hemos cambiado, todavía se ven cosas que no deberían verse en los más pequeños.
EliminarUn abrazo.
Un excelente texto todo él Sofía, y unas excelentes reflexiones sobre la extraordinaria "madurez" de los niños en lo que tiene de comportamiento natural...
ResponderEliminarComportamiento que se ve, como bien señalas, tintado por la "normalidad" de los adultos que los rodean, "enseñan" y/e intentan "dirigirlos" en los valores de la vida. Principalmente los suyos y sus carencias.
Las esperiencias vividas con ese grupo que relatas, no solo da satisfacción sino también lecciones!
Fuerte abrazo.
Hola, Ernesto.
EliminarPues así tal cual como lo cuentas es como lo vivo. Satisfacción y muchas lecciones, positivas y negativas, es lo que obtengo gracias a enseñar.
Fuerte abrazo, me alegro de verte por aquí.
me parece muy interesante todo lo aqui expuesto... besitos!
ResponderEliminarMil gracias, Aniña.
EliminarBesazo.
Que bueno Sofía. Una estupenda reflexión. Un abrazo
ResponderEliminarMuchas gracias, Betty. Me alegro de que te gustase.
EliminarUn besote.